Cuando una persona sufre un accidente de gravedad o presenta lesiones que le dificultan el movimiento, los médicos recomiendan que guarde reposo en una cama de hospital por un determinado periodo de tiempo. Esta puedes comprarla o recurrir a un servicio de alquiler de equipo biomédico, pero siempre es una buena opción por los beneficios que trae. En Clinical Home te los explicamos.
¿Cuándo se necesita una cama de hospital?
En el pasado quedaron las camas de hospital pesadas, viejas y sucias, con soportes de hierro fundido e incómodos colchones. Actualmente, son mucho más livianas y están diseñadas para que se puedan desmontar, transportar y montar con facilidad en muy poco tiempo. Asimismo, ha mejorado la calidad de los colchones disponibles.
Ahora bien, estas no son solo para los enfermos, los ancianos o los que están en el hospital, sino que, también, son esenciales para quienes se recuperan de una cirugía de espalda o abdominal en la que tienen problemas para acostarse y levantarse o no pueden colocarse cómodamente en una cama normal.
Sobre todo, es ideal una cama clínica eléctrica, pues permite ajustar la altura de la cabeza, los pies y la altura total a las necesidades del paciente.
Razones para el uso de camas de hospital
1. Mejor posicionamiento para pacientes
Cuando las personas se ven obligadas a pasar períodos prolongados en la cama, la presión que ejerce su cuerpo sobre esta provoca una gran cantidad de calor que queda atrapado entre la ropa, la cama y la piel, lo que ocasionará úlceras.
Estas llagas son extremadamente incómodas y difíciles de manejar. Frente a este problema, las camas de hospital se presentan como una alternativa para reposicionar al paciente debido a la facilidad para rotar y desplazar la presión por todo el cuerpo para aliviar el dolor.
2. Lesión o falta de movilidad
Con ciertas lesiones o cirugías, las personas pierden temporal o permanentemente parte de su movilidad. Y si tenemos en cuenta que mayormente los dormitorios se ubican en el segundo piso, se les hará difícil subir las escaleras.
Por ello, el alquiler de una cama clínica es una opción conveniente y temporal que permite al paciente acostarse y levantarse con mayor facilidad y menos dolor.
En ese sentido, las personas que están recuperándose de cirugías abdominales, de espalda o el embarazo a menudo alquilan camas de hospital, ya que les permite dormir cómodamente en un ángulo o posición que no les duele, y les permite acostarse y levantarse sin problemas.
3. Mejora la circulación sanguínea
Brinda a los usuarios el poder modificar y ajustar la cama para colocar mejor la cabeza y los pies. Estos cambios permiten el movimiento, así como la rotación periódica de los puntos de presión en el cuerpo, mejorando así la circulación sanguínea del paciente mientras está echado.
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4. Mayor seguridad
Las camas de hospital se convierten en una necesidad para las personas con afecciones que requieren el control y la atención de los cuidadores.
Los pacientes que corren el riesgo de caerse, como aquellos con demencia o deterioro cognitivo, necesitarán una con barandillas, o también llamadas rieles, para cuidar que no se caigan.
En ese sentido, los rieles ajustables proporcionan estabilidad y seguridad para evitar posibles accidentes.
5. Facilidad de traslado
Las personas que presentan dolor de cadera, lesión en la espalda baja o les han realizado cirugías tienen dificultades para moverse, y entrar o salir de la cama les resulta doloroso.
Por ello, uno de los beneficios más importantes de las camas clínicas es la facilidad de traslado, ya que permiten que el asistente de salud en el hogar suba o baje la cama a una altura que facilite mover al paciente.
6. Beneficios para el asistente de salud
Los cuidadores también se benefician del uso de camas de hospital, pues el levantar a sus pacientes, para llevarlos hacia su silla de ruedas, puede resultar muy agotador.
Asimismo, la sección de cabecera de una cama de hospital elevable permite al cuidador mover al paciente a una posición de sentado antes de realizar el traslado, lo que supone menos trabajo y ayuda a prevenir lesiones.
Esto cobra relevancia si se tiene en cuenta que cuanto más feliz y cómodo se sienta la persona que brinde el servicio de enfermería, más emocionado estará de ir a trabajar.
Además, si el cuidador presenta dolor o incomodidad física podría causar una lesión o un percance a las personas que está cuidando o a ellos mismos.
Por último, otro de los aspectos que debes tener en cuenta al adquirir una cama clínica, es el colchón. Puedes optar por uno de espuma, aire o gel. Algunos pueden reducir la presión en ciertas áreas del cuerpo y ayudan a prevenir las úlceras por presión.
Puedes comprar o alquilar uno en la misma tienda de suministros donde compraste la cama. Generalmente vienen con una funda impermeable y es posible que necesites otras almohadillas o accesorios para camas clínicas.
Recuerda que para brindar una mejor atención al paciente, puedes recurrir a un especialista en asistencia médica. En Clinical Home te ofrecemos los mejores profesionales y equipos, por eso, si uno de tus seres queridos está llevando un tratamiento médico, llena este formulario y te ayudaremos a cuidarlo.
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